
Aquí desparramo,
un dulce líquido de tristeza gladiadora:
estas piedritas que semillo en tu piel
Tengo los colores rotundos,
cercándome en la estancia del sol.
He puesto un martillo sobre mi mano
para decretar la libertad de mi abundancia.
Pero insiste en golpear cada palabra
grabar una leyenda en mi pelo
que ahuyente todo pájaro
Chagall: Amantes en Verde