jueves, mayo 21

Todos somos hijos de un árbol ardiente






El otoño y el gato amarillo


3 comentarios:

xnem dijo...

Sabía que TODOS habíamos bajado de los árboles -bueno casi todos, alguno aún sigue allí- pero lo que no sabía era porque estaba ardiendo.

Noctiluca dijo...

viste??? los datos nos vienen así, fragmentados, la información se va enhebrando y desenhebrando como una tela mágica :)

gracias por pasar caballero de los siete cielos.

un abrazo

amelche dijo...

¡Ja,ja,ja! ¡Qué bueno, Xnem!